Las obras de este Convento comenzaron en enero de 1675, inaugurándose el 18 de mayo de 1676, aunque las obras no terminan hasta el año 1704, cuando se acaba la fachada y la espadaña principal de tres huecos. Se ubica donde anteriormente estaba el Hospital de la Misericordia, hospital que servía para la asistencia de peregrinos y todos aquellos necesitados de la época. Al lado del hospital se añade una ermita para ubicar al Cristo de las Misericordias y con los años, con la ayuda de Sor Isabel de la Madre de Dios y la dotación económica de los Condes de Oropesa, se construye el convento.
La imagen que preside y da nombre a este Convento es el Santísimo Cristo de las Misericordias, patrón de La Calzada y cuya Fiesta se celebra todos los años el 14 de septiembre, con afluencia de gran número de feligreses venidos de todos los pueblos de la Comarca. Cabe destacar que esta imagen no procesiona nunca salvo por motivo de alguna rogatoria, principalmente de agua. En el año 2016, después de 35 años sin visitar las calles de La Calzada, volvió a procesionar con motivo del año jubilar de la Misericordia, que designó de forma extraordinaria el Papa Francisco. Fue tal la devoción demostrada por los cientos de fieles que participaron en esa procesión que el Ayuntamiento de La Calzada, con el apoyo de todos los vecinos devotos de la imagen y de las Madres Agustinas, acordaron que el Cristo de las Misericordias procesionaría a partir de ese año siempre que el día 14 de septiembre caiga en domingo.
Y como toda imagen que es venerada con ese fervor existe una leyenda acerca de su fundación que dice que en el siglo XVII, arruinado el hospital… “viéronse en ese tiempo sobre las ruinas aparecer repetidas veces unas extraordinarias luces y celestiales resplandores y, juzgando los vecinos prudentes que podía ser un celestial aviso, registraron las ruinas cuidadosos, y entre el ripio y los fragmentos de madera hallaron toda llena de polvo y telarañas una sagrada imagen de Cristo Señor Nuestro Crucificado…”.
El conjunto arquitectónico está formado por la zona conventual, la iglesia anexa al convento y el huerto donde se encuentran dos ermitas.
La iglesia de estilo renacentista tiene dos accesos, uno lateral y otro en fachada principal del convento. En su interior, de cruz latina, descansa el Santísimo Cristo de las Misericordias.
El conjunto arquitectónico está formado por la zona conventual, la iglesia anexa al convento y el huerto donde se encuentran dos ermitas.
La iglesia de estilo renacentista tiene dos accesos, uno lateral y otro en fachada principal del convento. En su interior, de cruz latina, descansa el Santísimo Cristo de las Misericordias.